martes, 18 de junio de 2013

LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA UN ACTO ÉTICO

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL
“RAFAEL MARÍA BARALT”
VICERECTORADO ACADÉMICO
PROGRAMA POSTGRADO
DOCTORADO EN CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN





ENSAYO
LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA UN ACTO  ÉTICO






                                                                   Autora: Arq. María Giorno. MSc.
                                                                   Prof. Dra. Marleny Pinto de Vera



                                                                                
                                                
Maracaibo, Junio de  2013




LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA UN ACTO ÉTICO
  
          A Través del ensayo se busca establecer el por qué la investigación educativa debe ser un acto ético, además de establecer los principios éticos y  los códigos de la investigación educativa así como la esencia de la investigación educativa. Para ello se considero como material de apoyo: La Ética de la Investigación Educativa de Leonor Buendía y Emilio Berrocal, de igual manera se consultó a Camps, Victoria, así como Los fundamentos morales de la investigación educativa de Carr entre otros.        
  
          El propósito es considerar como categoría de estudio: la Investigación Educativa y como variable de análisis: La Ética como Acto profesional, a fin de comprender la responsabilidad de asumirla en el proceso de investigación y en el área educativa, para ello se consideraron las siguientes interrogantes:
¿Por qué la Investigación Educativa debe ser un Acto Ético y por ende profesional?
¿Cuáles son los Principios Éticos de la Investigación Educativa y  sus implicaciones?
¿Cuáles son los códigos éticos de la Investigación Educativa y la urgencia de su práctica al momento de investigar?

          La investigación siempre ha estado presente en todas las esferas del conocimiento, sin embargo en el área educativa su uso y relevancia la diferencian. En relación a esto Nixon y Sikes (2003: 2), establecen que lo educativo requiere de una comprensión holística y no debe ser considerada como un simple conocimiento útil y relevante, puesto que sus cimientos epistemológicos son los fundamentos morales de la práctica educativa, por lo tanto,  la investigación educativa consiste en realizar investigaciones con propósitos educativos a fin de transformar a la sociedad en lo cultural, social, académico, logrando forjar la sociedad que se desea, en este sentido Olivé (2003), destaca que el trabajo del investigador debe estructurarse a través de la relación triangular: teoría, práctica e investigación.

          Con respecto a lo anterior considero que ciertamente las investigaciones en el campo educativo muchas veces no generan ningún tipo de transformación en el área en la cual se desarrollan, puesto que son someras, frías y con un único fin: aprobar un grado académico finalizado. Cuando el hacedor (supuesto investigador),  entienda lo que en realidad significa investigar y que para mí representa: estudiar, analizar, plantear y aplicar para lograr el cambio de la situación observada y analizada, entonces le dará el debido valor y será uno solo con la investigación a fin de modificar y transformar la situación problema que observa y vive.

           En lo que respecta a la ética, esta rige los deberes en sí mismos, que han de guiar la conducta. La ética profesional es el marco donde el ejercicio profesional debe realizarse incluyendo los deberes con la sociedad, con el cliente, con nuestros colegas y con nosotros mismo. Por consiguiente, esta está presente en cada uno de los que hacemos vida no solo en las instituciones educativas sino también a cualquier nivel sea económico, político, social.

          ¿Por qué se justifica el desarrollo de este tema?
          La importancia del tema relacionado con la Investigación Educativa como Acto ético y Profesional,  radica en la concienciación que el docente como investigador e instituciones educativas como formadoras y muchas veces como entes que facilitan la investigación a través de sus financiamientos, equipos y espacios,  deben considerar entorno a los cambios urgente que la sociedad y el colectivo estudiantil ameritan durante su formación académico y luego en su práctica profesional, puesto que los tiempos actuales, son de exigencias, debido al surgimiento  de nuevas tecnologías, métodos, estrategias en el campo de la investigación y por supuesto a nivel educativo.

          De ahí que en la actualidad es imperante el considerar la  Interrelación institución-docente-estudiante-comunidad-investigación, que debe enriquecerse a través del dialogo de saberes de manera más eficaz, rápida y adaptada a las necesidades del medio donde esta se propicie, puesto que las investigaciones educativas deben surgir en función de la necesidad del entorno al escenario educativo y con el fin de transformar esa realidad contraria a la capacitación, preparación profesionalización del ser social de ese contexto.

          Dado lo anterior y haciendo referencia a la investigación educativa, McCulloch (2003: 20), considera la urgencia de sistematizar los hechos y recuperar la historia de esta a fin de: hacer extensiva la idea de la investigación educativa como inversión que mejora la cualidad de la educación institucional, incrementar investigaciones rigurosas (lograr la teoría y el conocimiento) y relevantes (demanda de los prácticos en la mejora del producto), además de conocer información sobre los avances, limitaciones de la comunidad de Investigadores.

          En función a lo antes planteado por el autor,  el que conoce su historia podrá proyectar sus metas y propósitos para el futuro. En torno a este planteamiento, si creo necesario la sistematización del proceso de investigación dentro de las instituciones, porque eso aporta, corrige y mejora el desenvolvimiento del investigador, además el intercambio, las comparaciones y las oposiciones en cuanto a opiniones contribuyen a enriquecer de manera especial las diferentes investigaciones.

          Definitivamente el hecho educativo debe estar a la par del crecimiento, desarrollo y exigencias de la sociedad puesto que este complementa y aporta a los miembros de esa sociedad las herramientas que les permitan dar soluciones factibles a cualquier situación que se presente. En esto consiste  la importancia de tener docentes investigadores que estén a la par en el uso de nuevas técnicas, métodos o herramientas que permitan y faciliten guiar el aprendizaje de los estudiantes, siendo además un docente que conozca e interactué con esos seres que tienen potencialidades que hay que desarrollar para el bien de ellos mismos.

          La relación de todo esto con la Ética como acto profesional es evidente, como docentes debemos tener expectativas de cada día superar nuestras deficiencias, actualizar nuestras metodología, estrategias, técnicas y todos aquellos factores que contribuyen a enriquecer nuestro rol en este mundo lleno de vida y saberes diversos, es decir,  requerimos  cambio de pensamiento a fin de mejorar nuestra manera de actuar, teniendo presente que somos guías y no seres hegemónicos únicos dueños del saber. La ética en nuestro ejercicio es lo que nos lleva a ofrecer un servicio con calidad humana, con esmero y dedicación.

          En este sentido Sieber (2001.25), sostiene que el ser ético, es parte de un proceso de planeación, tratamiento y evaluación inteligente y sensible, en el cual se busca maximizar un producto bueno y minimizar el riesgo y el daño, es decir, si consideramos a la investigación educativa en este sentido, esta será buena si sus resultados afectan la práctica y se incrementa el conocimiento en la teoría educativa, de allí la influencia de la ética en la misma.

          En función a lo antes expuesto  cabria preguntarnos ¿Por qué la Investigación Educativa debe ser un Acto Ético y por ende profesional?

          La investigación de manera general siempre ha sido motivo de análisis y discusión, debido a la gran variedad de paradigmas y situaciones que se entretejen alrededor de ella. A través de este ensayo se busca desarrollar la investigación educación  como un acto ético y profesional, eslabón en las transformaciones del proceso educativo actual.

          Para ello se revisó la definición de ética  según Camps (2003), esta autora plantea que el ser humano debe aprender a vivir en paz y en concordancia con los otros, para ello el adopta una manera de ser, unas costumbres, principios, normas y deberes, es decir, la vida en comunidad debe estar regida por unas reglas que faciliten la armonía y el convivir y precisamente la ética conforma esa forma de vida y esas costumbres. Según esta autora la ética tiene una connotación  universal, de moral que vale para todos.

          En consecuencia Smith (2001: 3), establece que una perspectiva ética en las decisiones de la investigación involucra de manera inherente una tensión entre el juicio responsable y la aplicación rígida de las reglas. De hecho Camps (2003), reafirma que las normas éticas son asumidas por la conciencia individual, que es autónoma y las normas ética que nos las imponemos libremente a nosotros mismos.

          Por lo tanto, con respecto a lo planteado estoy de acuerdo con los autores al considerar que es el investigador consciente el responsable de hacer un trabajo con sentido, relevancia y honestidad, puesto que el,  como ser autónomo considera lo correcto, adecuado y propicio, descartando lo incorrecto, indebido e inapropiado al trabajo que esté desarrollando como investigador ético, responsable y profesional.

          Por consiguiente, el investigador educativo debe estar consciente de las responsabilidades que adquiere en función de los problemas que va a investigar, de las posibles consecuencias del proceso y de los medios que se eligen para lograr los propósitos (Olivé, 2003). Ciertamente la conciencia, la responsabilidad son dos valores que deben estar presentes en todo profesional que día a día desea superar sus debilidades y enriquecer sus habilidades en cuanto a conocimiento, práctica y transferencia de saberes.

          Así que, si consideramos lo planteado anteriormente, entonces podríamos afirmar que deben existir principios que regularicen y contribuyan a establecer límites al momento de realizar una investigación educativa, vale entonces preguntarnos:
 ¿Cuáles son los Principios Éticos de la Investigación Educativa y  sus implicaciones?
          A fin de dar respuesta a la interrogante, se hace necesario, enfatizar que la investigación educativa, considera la práctica y se construye desde ella para su transformación y mejora (Sánchez, 1997), en función a esto se plantean los siguientes principios éticos:
·    Respeto a la autonomía de los involucrados o participantes. Nunca nos debemos olvidar que son seres humanos no objetos que nos permiten lograr nuestros propósitos, en ningún momento debemos presionarlos con amenazas o dinero.
·         La privacidad de los participantes. Debemos guardar su anonimato y confiabilidad, a fin de conservar la armonía durante el desarrollo de la investigación. El anonimato resguarda la integridad física y moral del participante.
·    El principio de paridad, todos deben participar con igualdad, son fines en si no medios ni objetos.
·    El respeto mutuo. Sin jerarquizar según posición económica o académica.
·    La cautela al emitir juicios. Debemos ser objetivos y no subjetivos al interpretar resultados, emitir juicios y evaluar.

          Cada uno de estos principios éticos hará de la investigación educativa la estrategia más eficaz para solventar situaciones que causan atraso. La investigación educativa contribuye a transformar esas realidades problemáticas en situaciones beneficiarias a todo el contexto en el cual se desarrolla, además permite al investigador poner por obra sus valores, principios y normativas sin desmejorar la labor científica. Por lo tanto sus implicaciones repercuten en: obtener un producto acorde a la ética y necesidad y con calidad, haciendo de la problemática la mejor situación de bienestar para el afectado y su entorno. Luego de precisado los principios es necesario establecer bajo que códigos se debe regir esta labor de investigación educativa, por lo tanto, podemos dar respuesta a la tercera interrogante:
¿Cuáles son los códigos éticos de la Investigación Educativa y la urgencia de su práctica al momento de investigar?

           El código de Ética es el conjunto de principios y normas fundamentales que guían el deber y la normalidad que deben cumplir los profesionales  en el ejercicio de su profesión y en actos conexos con la misma, por lo tanto el código de ética de la investigación educativa es preciso y característico para ella. Los códigos en investigación educativa son relativamente recientes. El primero, aunque no directamente referido a una asociación de investigadores educativos, fue el de la American Psychological Association (APA) en el año 1940.  
        
  La preocupación más visible está centrada en el tratamiento de los participantes de la investigación (daño moral, respeto, confidencialidad) y en menor medida, el plagio y el fraude de datos. Sin embargo, el aumento de investigaciones cualitativas, ha hecho que se enfatice el control en el fraude de las informaciones. A nivel educativo se creó el código de la AERA (1992), el cual pone de manifiesto el respeto a los derechos y dignidad de los participantes en la investigación. Igualmente se insiste en la necesidad de solicitar conformidad para la participación.

           Por otra parte,  el código de la APA, concluye haciendo una llamada a la protección de la privacidad de los  participantes y de los datos, tanto como sea posible. Respecto a los fraudes con los datos dice: «La investigación educativa no debe fabricar, ni falsificar, ni ser fraudulenta con los datos, evidencias, resultados o conclusiones. Los investigadores deben, además, controlar el uso para evitar propósitos fraudulentos». Establece, al igual que la anterior norma sobre la propiedad intelectual, el plagio,  y todos los actos fraudulentos tanto en el desarrollo de la investigación como en las aplicaciones y difusión de resultados (Buendía y Berrocal)
          De hecho, Tuckman (1972) incorporó al ámbito de la investigación en Educación de carácter experimental algunas de las orientaciones éticas diseñadas en el seno de la APA. Estas orientaciones están basadas en los principios de la dignidad y valor del ser humano individual, por lo que se debe proteger el bienestar de las personas que buscan su servicio o que pueden ser objeto de su estudio. Es indudable que el código de ética al momento de llevar a cabo una investigación normaliza el cómo llevar a cabo ese proceso sin daño, ni perjudicar a los involucrados e incluso el contexto en el cual se desarrolla, por lo tanto es imprescindible el conocer y aplicar dichas normativas.

          En función a lo antes expuesto puedo afirmar que la investigación educativa es un acto ético y profesional por cuanto reúne principios éticos, regidos bajo un código de ética específico, por lo tanto se tiene que:

·    El investigador tiene el derecho de ser reconocido por la  autoría en cuanto genera un producto de investigación en su área laboral como profesional, quien mejor que él para conocer la problemática presente en su contexto.
·    Como profesional con ética (valores), debe reconocer sus limitaciones y alcances (competencias).
·    Como profesional ético, debe distinguir entre una problemática que genere respuesta satisfactorias y de transformación y entre una que genere conflictos y contratiempos y no vaya a propiciar cambios.
·    Como profesional que tiene ética, debe considerar a los involucrados en el hecho investigativo como seres humanos (con derechos, respeto, privacidad)  y no como simples objetos de estudio.
·    Como profesional con ética debe respetar la decisión de divulgar o no la información otorgada por los involucrados, es decir, no debe recurrir a la manipulación con el fin de lograr sus propósitos y difundir una información ajena sin permiso.
·    Debe conservar el anonimato de los involucrados a fin de resguardar su integridad física y moral, al menos que estos autoricen, pero cuidado sin manipulaciones.
·    Al hacer referencia en la redacción a los involucrados, el profesional investigador debe utilizar un lenguaje respetuoso, inofensivos que se perciban como peyorativos y se deben evitar el considerar grupos como parámetro para juzgar a otros grupos.

          Por todas las razones antes expuesta considero que la investigación debe ser un acto ético con principios y códigos éticos, donde se resguarde en todo momento la integridad de los involucrados, sus intimidades, evitando ser utilizados como simples objetos que logran dar respuestas a nuestras ambiciones profesionales y donde la ética permite conservar el respeto, el anonimato,  la armonía entre la realidad y nuestra manera propia de pensar en relación a la situación observada. Considero que la ética es el freno que tiene el investigador que como profesional debe aprender a expresar su contenido interior de manera armoniosa, moral, adecuada y agradable. 

          En función de lo antes expuesto puedo concluir diciendo:

·    La investigación educativa entendida como disciplina, es un conjunto de acciones sistemáticas con objetivos propios, que describen, interpretan o actúan sobre una realidad educativa, el cual permiten organizar nuevos conocimientos, teorías, métodos y procedimientos educativos existente. Lo que distingue la investigación educativa de otro tipo de investigación, es su uso y relevancia en la praxis educativa.
· Ser ético no se refiere nada más a hacer elecciones éticas en respuesta a situaciones particulares, sino más bien a comprometerse en un todo como persona, como educador, como investigador, en un proceso donde se trata de expresar algo sobre sí mismo, un estilo de vida. En un sentido importante, se ocupa del equilibrio que conseguimos entre nuestros valores personales, respetando la justicia y la moralidad, y los valores sociales que se deben. (Kuschner, 2002).

·   Igualmente comprender y resolver la tensión existente entre los valores compartidos en un contexto globalizado y los valores éticos propios de la cultura propia. Las normas morales y los valores que regulan las acciones y las interacciones humanas se deben establecer de común acuerdo entre los seres humanos, eso permite que varíen de una época a otra y de un contexto a otro (Olivé, 2003).

·   La mayor parte de las investigaciones tienen potencialmente el riesgo de generar conflictos, estos permiten al investigador comprender sus responsabilidades a la ciencia, a la sociedad, a los estudiantes y a los participantes del proceso de la investigación (Smith, 2001).


· Los investigadores encontrarán que a veces es difícil seguir un principio ético sin violar algún otro, en esas situaciones, la meta es diseñar la solución más razonable. Lo que todos o la mayoría quieren o desean no siempre coincide con lo justo y bueno, es decir con los juicios morales.

·    El acto ético es aquel que se ejerce responsablemente, evitando perjuicios a personas


REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

Carr (2003) (Eds.) Los fundamentos morales de la investigación educativa: el conocimiento, la investigación y los valores, Inglaterra, McGraw-Hill Education / Open University Press, pp 6-17.

Camps, Victoria, (2003) Ética para las ciencias y técnicas de la vida en Ibarra y Olivé (Eds.) Cuestiones éticas en ciencia y tecnología en el siglo XXI, Madrid, OEI, pp. 225-244.

McCulloch, Gary (2003) Hacia una historia social de la investigación educativa, en Sikes, Nixon y Carr (2003) (eds.) los fundamentos morales de la investigación educativa: investigación, conocimiento y valores, Inglaterra, McGraw-Hill Educación / Open University Press, págs. 18-31
Nixon, Walker y Clough (2003) Los fundamentos morales de la investigación educativa de investigación como una práctica reflexiva, en Sikes, Nixon y Carr (2003) (eds.): conocimiento, investigación y valores, Inglaterra, McGraw-Hill Education / Open University Press, págs. 86 - 104.
Olivé, León, (2003) Ética aplicada a las ciencias naturales y a la tecnología en Ibarra y Olivé (Eds.)Cuestiones éticas en ciencia y tecnología en el siglo XXI, Madrid, OEI, pp. 181.
Sánchez, C. (1997): «Dilemas éticos de la investigación educativa», en Revista de Educación, 312; 271-280.
Sieber, Joan E. (2001) Planificación de investigación: Básica decisiones éticas. En ventas y Folkman (eds.) ética en la investigación con participantes humanos, Washington, APA, págs. 13-26.
Smith, Brewster (2001) Fundamentos morales de la investigación con seres humanos. En venta y Ética
Universidad Nacional Experimental “Rafael María Baralt” (2005) Normas para la Elaboración y Presentación de Informes de Investigación. Cabimas. Junio.


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