PROBLEMAS ÉTICOS DE LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA
EDUCATIONAL RESEARCH
ETHICAL ISSUES
María Giorno
RESUMEN
El presente artículo tiene como propósito:
Analizar los problemas éticos de la Investigación Educativa, considerando los
principios éticos del educador así como los problemas éticos a nivel de:
participantes, durante el desarrollo, los propios del investigador, los daños a otros investigadores y los sociales,
a fin de fomentar la transparencia de los procesos de investigación educativa a nivel universitario. Utilizando
la revisión documental de diferentes autores en relación al tema con el
propósito de realizar un análisis crítico y unas reflexiones teóricas, dando
como resultado, que la transparencia en el proceso de investigación educativa
se acrecienta en el docente investigador cuando: esté formado en valores,
practique los principios éticos como docente y sea responsable al admitir sus
carencias, fallas y debilidades; de donde no debe optar al plagio ni
utilización de datos falsos para cubrir dichas deficiencias, además el conocer,
estudiar y analizar los problemas éticos que pueden surgir durante una
investigación, evitara el daño que se
genera a personas, claves en la investigación. Se concluye que los docentes
investigadores deben ser éticos en cuanto a: responsabilidad con los
participantes, en tratarlos adecuadamente,
guardando su autonomía, privacidad y sobre todo deben evitar situaciones inadecuadas e indignas de un
investigador ético.
Palabras claves: Investigación Educativa,
problemas éticos, daños sociales, Principios éticos
ABSTRACT
This article
has as purpose: analyze the ethical problems of educational research,
considering the ethical principles of the educator as well as the ethical
problems at the level of: participants, during development, the researcher's
own, damage to other researchers and social, in order to promote the
transparency of the process of educational research at the University level.
Using the documentary review of different authors concerning the issue in order
to carry out a critical analysis and theoretical reflections, giving as a
result, the transparency in the process of educational research is increasing
in the researcher teacher when: is formed in values, practice teaching ethical
principles and is responsible to admit their shortcomings, failures and
weaknesses; where not you should opt to plagiarism or use of false data to
cover these deficiencies, also understand, study and analyze the ethical
problems that can arise during an investigation, avoid damage generated by
people, key to the investigation. It is concluded that researchers teachers
must be ethical as a: responsibility with the participants, to treat them
properly, keeping its autonomy, privacy and above all must avoid inadequate and
unworthy of an ethical researcher.
Key words: Educational
research, ethical problems, damage social, ethical principles.
INTRODUCCIÓN
La
investigación, como proceso es sistemática, por cuanto emplea una metodología y
utiliza una estructura, además busca desarrollar conocimientos generalizables por
cuanto se aplica a un grupo más amplio del que participó, lo que implica la
presencia de ciertas dificultades o problemas de índole éticos al momento de su
desarrollo. En consideración a esto se pretende a través de este articulo analizar
los principios del docente así como cada uno de los problemas éticos presentes
al momento de investigar en el plano educativo, sea con respecto a los
participantes, en el desarrollo del trabajo, del propio investigador, daños a
otros investigadores e incluso daños sociales, que en muchos casos llegan a ser
irreversibles. Con respecto a todo lo anterior es indudable que cada uno de
esos problemas generan complicaciones que no ayudan en nada ni al docente investigador
ni a la investigación que se está ejecutando puesto que el fin de esta, debe
ser el transformar la situación negativa a fin de mejorarla según afirma
Sánchez (1997), y no el complicar más la
situación debido a la práctica poco o nada ética del educador. Por lo tanto, si
consideramos la práctica educativa como propia y característica al contexto
cultural, social y educativo en el cual se desarrolla la situación que debe ser
cambiada, puesto que esta surge como dice el autor de la vivencia educativa del
diario de una institución y sus colectivos sea cual sea su nivel académico;
entonces esta práctica se considera como propia a cada docente, por lo tanto, se
hace necesario el considerar bajo que principios éticos se mueve ese educador
que día a día enfrenta la situación problema. Ahora bien la práctica educativa
siempre está influenciada por diversos factores entre los que se pueden
mencionar: lo económico, social, político, pedagógico, familiar, ideológico e incluso el medio físico, lo que
sugiere que son muchas las posibles vertientes de soluciones o/y problemas que
pueden presentarse antes, durante y luego de finalizada la investigación.
El
hecho de analizar las diferentes problemáticas éticas que pueden de una u otra
manera afectar el hecho de investigación permitirá realizar un trabajo con transparencia
y con un propósito propio, por lo tanto, el docente investigador debe tener claro que trabaja con seres humanos no con
objetos, de donde aquel que colabora como participante tiene carencias,
emociones y sentimientos por ende se
requiere el considerarlo no como un simple objeto de estudio sino como un ser que
tiene autonomía, valores, privacidad que deben respetarse y considerarse
durante el desarrollo de la investigación. Claro está, se debe estar consciente que el fin de todo es
lograr transformar la realidad social educativa propia lo que implica de ante
mano el no plagiar, ni utilizar datos falsos que conduzcan a obtener resultados
pocos confiables y que no contribuirán a solventar la situación negativa, en
consecuencia el fin de toda investigación debe ser el impartir la suma
felicidad del colectivo involucrado así como del investigador, al ser
protagonista de un cambio producto de una investigación transparente que va en
beneficio de muchos, por consiguiente debe evitar daños a sus colegas de
trabajo y a su contexto social en el cual se desenvuelve.
En función a
lo anterior y para dar respuesta a la problemática expuesta, se planteó: Analizar los problemas éticos de la
Investigación Educativa, a fin de fomentar la transparencia de los procesos
de investigación en educación universitaria.
Por consiguiente es pertinente,
generar la siguiente interrogante:
·
¿Conocer los problemas
éticos de la investigación educativa permite fomentar la transparencia del
proceso investigativo?
En función a esto, surge como
objetivo general de investigación:
- Analizar los problemas éticos de la investigación
educativa presentes al momento de realizar un trabajo de investigación.
Y como
objetivos específicos, los siguientes:
- Establecer los
principios éticos del educador como profesional.
- Determinar los problemas éticos respecto a los
participantes al momento de realizar un trabajo de investigación.
- Determinar los problemas éticos del propio
investigador al momento de realizar
un trabajo de investigación.
- Precisar los problemas éticos en el desarrollo del
trabajo al momento de realizar un trabajo de investigación.
- Describir los daños causados a otros investigadores
al momento de realizar un trabajo de investigación.
- Establecer los daños sociales al momento de realizar
un trabajo de investigación.
FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA.
Reflexiones teóricas
A fin de poder sustentar los
objetivos planteados, se presentan los siguientes preceptos teóricos.
INVESTIGACIÓN EDUCATIVA. La
investigación siempre ha estado presente en todas las esferas del conocimiento,
sin embargo en el área educativa su uso y relevancia la diferencian. En
relación a esto Nixon y Sikes (2003: 2), establecen que lo educativo requiere
de una comprensión holística y no debe ser considerada como un simple
conocimiento útil y relevante, puesto que sus cimientos epistemológicos son los
fundamentos morales de la práctica educativa, por lo tanto, la investigación educativa consiste en
realizar investigaciones con propósitos educativos a fin de transformar a la
sociedad en lo cultural, social, académico, logrando forjar la sociedad que se
desea, en este sentido Olivé (2003), destaca que el trabajo del investigador
debe estructurarse a través de la relación triangular: teoría, práctica e
investigación. En el mismo orden de ideas,
McCulloch (2003: 20), considera la urgencia de sistematizar los hechos y
recuperar la historia de la investigación educativa a fin de: hacer extensiva
la idea de la investigación educativa como inversión que mejora la cualidad de
la educación institucional, incrementar investigaciones rigurosas (lograr la
teoría y el conocimiento) y relevantes (demanda de los prácticos en la mejora
del producto), además de conocer información sobre los avances, limitaciones de
la comunidad de Investigadores.
Reflexión
Con respecto al planteamiento anterior, sin dudas
la investigación educativa es necesaria en cada ámbito educativo, ya que a
través de ella se resuelven situaciones con una alta incidencia en los procesos
enseñanza aprendizaje, de tal manera que si considero pertinente lo planteado
por McCulloch (2003: 20), en torno a lo sistemático de los hechos y
el recuperar la historia, puesto que a
través de ella se solventan y transforman realidades social educativas lo que
contribuye a tener instituciones, docentes, estudiantes en fin colectivos
fortalecidos y tratados desde un punto investigativo, disminuyendo todos
aquellos obstáculos que impiden el continuo crecimiento académico, social,
familiar, con lo cual se requieren de docentes que se desempeñen en la investigación
educativa.
PROBLEMAS
ÉTICOS. Según el Dr. González (2008), un problema ético es aquello que no está correcto y que afecta al individuo y a la
sociedad. Algo que afecta la dignidad del individuo. Afecta el bien común. En
este sentido trasciende los intereses de la institución. En un sentido amplio,
un problema ético es un acontecimiento en el que se plantea una situación
posible en el ámbito de la realidad pero conflictiva a nivel moral. Ello
demanda, bien una solución razonada del conflicto, o un análisis de la solución
adoptada por el sujeto protagonista de la historia. Lo común es que la
situación se muestra como una elección conflictiva: el sujeto protagonista se
encuentra ante un escenario decisivo ante el cual sólo existen dos, y nada más que
dos opciones siendo ambas soluciones igualmente factibles y defendibles. El
sujeto se encuentra, pues ante una verdadera e inevitable situación complicada,
en la cual se pueden presentar múltiples cuestionamientos antes de una elección.
Para el autor antes señalado,
un problema ético implica reflexionar con relación a los siguientes aspectos:
1. Un comportamiento no está correcto, cuando provoca una controversia
que afecta a otro o a la sociedad en su conjunto.
2. Cuando sobrepasa las normas planteadas por lo legal o de la misión de
la institución. Cuando daña a las personas en su dignidad, derechos o
simplemente algo que afecta el bien común
3. Para el reconocimiento de los dilemas éticos es importante considerar
la cuestión o el asunto lo más objetivo que se pueda. Considerarlo a partir de
tendencias propias. Explicar cómo se da la situación, considerar los hechos.
4. Considera los hechos, separar lo mas significante, observar las
distintas partes del acontecimiento planteado.
5. Dónde el problema sitúa la lealtad del individuo o a uno mismo como
persona, en relación a la sociedad y a la institución.
6. Considerar si se interpone a una solución objetiva.
7. Nivel de afectación: ¿Quiénes son afectados y cómo son afectados?
Explorar si hay otros afectados.
8. Intenta explicar el asunto a alguien que está fuera del problema
incluyendo esta explicación a los dañados. Ello permite tomar argumentos para
el estudio y análisis del caso.
9. Trata de explicar el asunto a alguien fuera del problema. Trata de
explicar el asunto a alguien que le afecte el problema.
10. ¿Cuál es el significado que tiene el hecho en términos de daño que
tiene para la sociedad/ beneficio para el infractor?
11. Si se sabe de forma premeditada el daño que se causa bajo una
actuación determinada o predeterminada.
12. Intencionalidad de la actuación o no actuación.
13. Situar el análisis en las alternativas que están acorde al respeto
de los derechos de dignidad humana.
14. Pensar en cuál opción es justa para todos o está dando ventajas a
unos más que otros.
15. Sentido común: observar cual opción es más beneficiosa para el bien
común.
16. Reflexionar en torno a los valores o virtudes que se desarrolla con
una alternativa justa.
17. Comparar si la decisión tomada es similar a otras planteadas en el
pasado. Aquí el rol de la historia es relevante.
En lo personal:
1. Preocuparse por el nivel de generalización de la decisión y si la
opción planteada está acorde o en conflicto con los códigos éticos existentes.
2. Al tomar la decisión reflexiona con relación a lo siguiente:
a. ¿Cuál es la mejor alternativa?
b. Si le dijeras las razones que te hacen tomar esta alternativa a
alguien que usted respeta, ¿Qué diría esta persona?
c. ¿Podrías publicar tu decisión con la frente en alto?
d. ¿Cuáles serían las circunstancias que te hicieran retroceder en tu
decisión?
e. ¿Es esta decisión consistente con otras tomadas en el pasado?
3. Reflexionar en el resultado de tu decisión, esto implica observar:
a. ¿Cuál fue el resultado?
b. ¿Cómo afecto a todos los implicados en el asunto?
c. Si tuvieras la misma situación otra vez, ¿tomarías la misma
alternativa o hicieras algo diferente?
Reflexión.
Con respecto a lo que
implica teóricamente un problema ético, puedo afirmar que este se presenta al
actuar de manera inconsciente, apresurada y sin tener suficientes herramientas
que permitan actuar de modo correcto, en otras palabras, el estar formado en
valores, el respetarnos a nosotros mismos como profesionales, el considerar al
prójimo como alguien que de igual manera tiene sentimientos, emociones,
necesidades, y autonomía siempre nos
llevara a meditar y reconsiderar antes de tomar una decisión o accionar de
manera incorrecta o inadecuada. Ciertamente debemos siempre considerar cual es
nuestra verdadera intensión al investigar, pues como docentes somos el eslabón,
el enlace entre la necesidad latente en nuestro medio educativo y la solución
factible a corto plazo, por tanto, siempre debemos estar enfocados hacia la necesidad y no nuestros propios
intereses.
PRINCIPIOS ÉTICOS DEL EDUCADOR. El docente debe actuar en
todo momento apegado a las normas éticas de su profesión, ya que este es modelo
a seguir por sus estudiantes. En tal sentido Alexei (2005) expresa que “La
ética profesional del maestro tiene una gran tarea en la sociedad, ya que es la
responsable de la formación de las nuevas generaciones” (p.2). Del mismo modo
considera que la ética pedagógica estudia el carácter de la actividad moral del
pedagogo y las relaciones morales en el medio pedagógico. Por otra parte ésta
ética refleja la necesidad de una sólida preparación del docente para impartir
clase con calidad. De aquí que el desempeño profesional independientemente del
área que se ejerza requiere ser guiado por los principios y valores éticos
fundamentales en las profesiones. En este sentido, Angulo y Acuña (2005), establecen que “La
ética es el ideal de la conducta humana, orientando sobre lo que es bueno y
correcto, ésta se consolida cuando se internalizan las normas sin que exista
presión exógena para su cumplimiento. La ética de un profesional, se gesta
desde su formación, por ello el docente debe actuar en esta etapa de forma
correcta, y para realizar esta labor tiene que conocer de ética y de cómo debe
ser su comportamiento como docente” (p.1).
El profesional de la
educación, debe desarrollar su trabajo basado en valores y principios éticos,
ya que como guía moldea el comportamiento a través de su actuar, siendo modelo
a seguir y en este sentido requiere de una sólida formación, de un perfil
adecuado y de unos principios básicos que les permitan vencer cualquier
problema que se le presente. Guzmán (2004) dice que el educador debe cumplir con
cuatro principios éticos siendo estos:
·
Preparación intelectual
·
Moral de alta calidad
·
Respeto máximo por los
derechos de los estudiantes.
·
Una conducta personal
intachable.
Esto indica que para ejercer
como educador, se requiere de unas condiciones específicas y que no basta con
tener conocimientos o poseer un título académico, sino que va más allá de eso;
se requiere de una conducta y formación puramente ética. Es posible
que esto lleve a reflexionar, sobre la realidad de los profesores, quienes en
una cantidad considerable no tienen en cuenta las normas éticas para ejercer su
rol docente, ya que en muchos casos los estudiantes se quejan amargamente
porque estos profesores abusan de su poder, utilizan tráfico de influencia,
sobornan o se dejan sobornar. Esto va en detrimento de sus estudiantes,
de su clase profesional y de las instituciones para la que laboran,
porque las misma son valoradas en función de lo que hace ese docente en
particular y en el caso de los estudiantes muchas veces abandonan los estudios
porque se frustran ante tales acciones . Esto conlleva que la gestión
universitaria ejerza un mayor control de las acciones del docente en el aula y
de su manejo ético/ pedagógico.
En
este mismo orden de ideas, existen otros principios que se deben considerar,
entre ellos se tienen:
·
El proceder siempre conforme a
la justicia. Este
principio es aquel por el cual la sociedad
pretende distribuir de un modo equitativo y racional los recursos sociales existentes. Este principio puede
entenderse en dos sentidos; por una parte,
se refiere a la equidad entre los servicios prestados por el docente y el bien
obtenido, es decir, la
equivalencia entre lo que cada parte da y recibe. El segundo sentido, que tiene
un calado más ético, se refiere
a la justicia social, es decir, los docentes deben ser solidarios con todos los miembros de la sociedad, de manera
que deben prestar sus servicios a todas las personas cuando sean necesarios para la satisfacción
de sus necesidades básicas. “El principio de justicia obliga a situar el ejercicio
profesional en el marco de una ética social” (Hortal, 2002: 155).
·
Proceder con autonomía
profesional. Este principio engloba tres aspectos: a) Las decisiones
profesionales se han de adoptar, en última instancia, desde las convicciones éticas personales, no dejándose
presionar por coacciones externas y procurando promover la mayor autonomía posible del estudiantado; b)
adoptar libremente una regulación corporativa que permita, en caso de
conflicto, disponer de protocolos de actuación validados por el colectivo de los profesionales docentes y que,
a su vez, orienten las buenas prácticas de la profesión; y c) tomar las decisiones y asumir las responsabilidades
correspondientes a las mismas.
·
El
principio de beneficencia: Poner las competencias profesionales al
servicio del bien de los usuarios. Este
principio consiste en hacer el bien propio de la profesión, y es el principio
ético que la legítima. En el caso que nos ocupa de la ética del docente,
consiste en el empleo de sus competencias para el aprendizaje de sus
estudiantes en la solución de los problemas que plantean, procurando
ofrecerles una prestación experta, que les facilite la comprensión técnica, científica
y social de los conocimientos impartidos. Por último, el empleo por el
docente de los conocimientos o destrezas para hacer daño (el principio
de maleficencia) a los usuarios de su servicio, constituye la más grave
de las infracciones de la ética profesional.
·
Proceder siempre con responsabilidad
profesional. Un buen
profesional docente conserva, mejora y actualiza su competencia profesional. Ha
de estar al tanto de las nuevas
teorías de la especialidad de su docencia, de las nuevas metodologías para facilitar el aprendizaje del
estudiantado, de la colaboración con los colegas de la profesión, de la colaboración con las familias y de
las demandas de la sociedad. En consecución a lo anterior, el docente tiene la obligación moral de actualizarse, para
mejorar la calidad técnica y humana del servicio que presta. La actuación responsable del docente
implica que sólo puede tomar las decisiones de intervención, después de evaluados cuidadosamente
los riesgos de la misma y descartadas las consecuencias negativas que podrían producirse (Chávez, 2008).
·
El principio de imparcialidad. Este principio de imparcialidad o no discriminación es la
base para una actuación del docente que ha de tratar como iguales a todos los involucrados o
participantes sin distinción alguna de
raza, color, sexo, idioma, religión,
opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición
económica, nacimiento o
cualquier otra condición (art. 2.1. de la Declaración Universal de los Derechos Humanos).
·
El principio de
confidencialidad o secreto profesional. Consiste en que el docente asuma la obligación de no
difundir aquella información relacionada con el proceso de
investigación, salvo que pudiera suponer un delito o peligro para terceros. La
confidencialidad se refiere al derecho que tiene el participante a
controlar los datos que ha puesto a disposición del docente, siempre que
no autorice su conocimiento por terceros.
·
El principio de veracidad. Esta se refiere a
que la comunicación con las personas (estudiantes, compañeros, familias, representantes institucionales…)
tiene que estar basada en la convicción de los interlocutores de que cada uno dice lo que cree que es la
verdad. Lo contrario a la veracidad es la mentira y el engaño. El docente debe gozar de prestigio en
materia de integridad y honestidad y actuar en consecuencia (Hirsch, 2008). Estas características son aspectos que se relacionan con
el carácter y estilo de su vida. Poseer estos valores le permitirá brindar
confianza a las personas a las que ofrece su servicio. Nunca debe mentir.
·
El Respeto a la dignidad
personal de todos los miembros de la comunidad educativa. Este es el principio moral básico de la ética e implica
respetar la conciencia, la
intimidad y las características diferenciales de cada persona, así como el
rechazo a toda clase de
instrumentación o forma de violencia sobre la misma (Escámez, 2006). El reconocimiento de la dignidad del
otro como un valor que le pertenece, significa descubrir la humanidad en cada persona, descubrir
que cada persona es capaz de hacerse cargo de su vida y, este valor, impone la obligación moral al
docente de considerar al otro como un ser único e irrepetible. El respeto a cada persona, como
alguien insustituible, necesariamente tiene que conducir al cuidado de la misma, como objetivo de
desvelo profesional.
Para que un docente actúe de manera
ética debe estar formado en valores, para que de este modo actúe apegado
fielmente a lo establecido por los códigos de ética institucionales. Con
relación a esto Madé (2002), precisa que la importancia de que los
docentes universitarios estén formados en valores es primordial, ya que según
él, estos deben poseer unas actitudes personales inherentes a su función
educadora, para alcanzar el éxito profesional; tener una actitud que les
permita asumir un auto concepto ajustado y positivo, una disposición para
enfrentarse a situaciones que impliquen conflictos de valores, auspiciar y
asumir el trabajo en equipo y habilidades para crear el clima escolar en el que
los estudiantes se aborden interactivamente como seres iguales. (p.231). De
igual manera González (2005) establece: “El profesor universitario ha de ser
para sus estudiantes un modelo de actuación personal y profesional, un ejemplo
que estimule a sus estudiantes en el proceso de su construcción como persona,
en el ejercicio de la profesión. Esto implica necesariamente el desarrollo del
profesor como persona moral. Para ser modelo hay que ser coherente, tiene que
mostrar correspondencia entre lo que dice y hace”. Si se toma en consideración
esta opinión, es de entender que la función del docente conlleva un alto grado
de cumplimiento de la ética.
Por consiguiente, el investigador educativo debe estar consciente de las
responsabilidades que adquiere en función de los problemas que va a investigar,
de las posibles consecuencias del proceso y de los medios que se eligen para
lograr los propósitos (Olivé, 2003).
· Establecer los principios éticos
del educador como profesional. Reflexión.
Con atención a los principios éticos del docente, los
autores mencionados: Alexei (2005), Angulo y Acuña (2005), Guzmán (2004),
(Hortal, 2002: 155), (Chávez, 2008), (Hirsch, 2008), (Escámez, 2006), Madé (2002), (Olivé,
2003), González (2005), cada uno
de ellos han planteado principios
que tocan todas las áreas que conforman a un ser que es integral en:
conocimiento, como ser social, humano, como agente facilitador de saberes, como
intermediario entre la institución y el medio social, cultural, por lo tanto,
el docente antes que a si mismo se debe al estudiantado, a la comunidad que
esperan de el todo lo mejor, lo honesto, lo agradable, lo perfecto, de donde
siempre será modelo y ejemplo a seguir por sus estudiantes y que se pare donde
se pare no dejara de ser docente, reconocido por su actuar correcto o
incorrecto, por su trato deseable o indeseable, por su esmero en compartir o no
saberes, en fin, todo docente es el reflejo de un ser integral que día a día
debe esmerarse en perfeccionar su trabajo y enriquecerlo con el trato, la interacción
con sus estudiantes y comunidad. Y sobre todas las cosas debe tener principios
éticos que enriquecen su actuar a través de ser: respetuoso, justo, tener una conducta intachable, tener autonomía
profesional, ser imparcial, confiable, confidencial y veraz, sin olvidar que: “El
principio de justicia obliga a situar el ejercicio profesional en el marco de
una ética social” (Hortal, 2002: 155).
PROBLEMAS ÉTICOS RESPECTO A LOS PARTICIPANTES. En la investigación se recurre a personas de las que se
tiene una información personal identificable y que suministran datos. Son los
participantes. Estos datos se consiguen interviniendo en el participante o en
su entorno, o bien interactuando con el participante. Es de esperar que la
información que éste suministre sea confidencial. Para que una persona pase a
ser participante en una investigación es necesario, según las pautas éticas,
que otorgue su consentimiento informado voluntario. Ello implica que (1) ha
recibido la información necesaria, (2) la ha entendido y (3) ha tomado una
decisión libre de coacción, intimidación, influencia o incentivo excesivo. El
consentimiento informado expresa el principio fundamental de respeto a las
personas y no es sólo un documento que haya que firmarse, sino un proceso de
comunicación entre participante e investigador.
Por consiguiente, los elementos
esenciales de un consentimiento informado son, según el código:
1.
Descripción de la investigación. Debe quedar claro que se trata de
una investigación, con unos objetivos explícitos y unas expectativas de
resultados, que requiere aplicar unos procedimientos concretos a los que el
participante se someterá si da su consentimiento. 2. Descripción de los riesgos.
Debe explicitarse con claridad los riesgos físicos, psicológicos y sociales.
Esta expresión debe ser revisada y aprobada por un comité de ética. 3. Descripción
de los beneficios. Éstos no deben exagerarse, ni incluirse entre
ellos beneficios que obtendría aunque no participara en el estudio. 4. Alternativas
disponibles. Especialmente en el caso de la investigación médica,
debe especificarse al participante qué vías tiene a su alcance (por ejemplo, de
tratamiento) si no participa en el estudio y, por tanto, si no obtiene los beneficios
de éste. 5. Confidencialidad. Debe especificarse qué personas u
organismos tendrán acceso a los datos que el participante va a proporcionar. A
veces, el mayor riesgo para el participante es la falta de confidencialidad. 6. Indemnización.
Especificación de las indemnizaciones al participante si surgen problemas en el
estudio. Es permisible también indemnizar a los participantes por el tiempo,
los viajes y las molestias. Su cálculo debe basarse en costos locales. 7. Contactos
del participante. La información de contacto debe ser realista, económicamente viable y culturalmente
apropiada. Se refiere a la persona con quien el participante puede contactar
para resolver dudas o pedir información. No puede ser del equipo investigador.
Una buena decisión es que sea del comité de ética. 8. Participación voluntaria.
Esto debe quedar muy claro. Participar es voluntario y es posible retirarse una
vez la investigación está en marcha.
Ello no provocará perjuicios ni
privará de beneficios a los que la persona de todas formas tiene derecho. 9. Documento.
El consentimiento informado se expresa en un documento que es recomendable que
el participante firme si lo ha entendido todo y está de acuerdo. Sin embargo,
en algunos estudios como las encuestas, no es posible un documento de
consentimiento informado tan extenso e, incluso, firmarlo puede ser concebido
como una exigencia innecesaria para la persona encuestada. En diversas
situaciones, por tanto, el comité de ética puede permitir al investigador
eliminar algunos o todos los elementos del consentimiento informado. La Regla Común establece cuatro requisitos para la exención del
consentimiento informado: (1) el riesgo para el participante es mínimo, (2) la
exención no implica perjuicios ni pérdida de beneficios, (3) si no hay exención
la investigación no es posible, y (4) si es apropiado, se le facilitará información adicional al participante tras su
participación.
Determinar los problemas
éticos respecto a los participantes al momento de realizar un trabajo de investigación.
Reflexión
Entorno a los problemas éticos con
los participantes, el docente investigador debe respetar ante cualquier
propósito desviado o interés particular propio la autonomía, decisión y
consideración del participante, además de notificarles cuál es el propósito de
la investigación, porque de no hacerlo
estaría violando su privacidad, autonomía y su condición de ser, por lo tanto,
si tiene principios éticos debe éticamente tratar al que participa así como
cualquier tipo de información que este aporte. Según el contexto anterior, estos
se evitaran cuando:
·
Se solicite al participante la información de manera acorde y
respetuosa.
·
Debe ser voluntario, sin coacción, influencias o intimidaciones.
·
Se debe dar a conocer el verdadero propósito de la investigación, así
como los posibles riesgos e incluso se debe indemnizar al participante si algo
le llegara a ocurrir
·
Informar el tipo de público que tendrá acceso a sus confidencias
·
Establecer legalidad a través de un documento que garantice la
seguridad e integridad del participante.
PROBLEMAS ÉTICOS EN EL
DESARROLLO DEL TRABAJO. Estos se presentan durante la planificación y en el proceso o
utilización de los resultados. Según Buendía y Berrocal (2001), los problemas
se presentan si la intención del investigador no son las más apropiadas a la
situación problema, según los autores estos pueden ser:
·
Al momento de planificar, si el investigador tiene propósitos
desviados a lo que debe ser como: provecho político, publicidad, provecho
personal, relaciones públicas, prestigio y justificación de resultados,
entonces los resultados obtenidos
tendrán mal uso.
·
Durante el proceso, el investigador busca prorrogar decisiones críticas,
trabajar con muestras intencionales para fines políticos o personales, utilizar
influencias para sabotear la información, entonces los resultados obtenidos
tendrán mal uso y la investigación no estará concluida.
·
Si al obtener los resultados, el investigador acepta hipótesis
falsas, modifica conclusiones, simplifica, exagera u oculta resultados y
elabora informes intencionados entonces los resultados serán mal utilizados,
tendrán un uso indebido, conscientemente de unos falsos resultados.
Precisar los problemas
éticos en el desarrollo del trabajo al momento de realizar un trabajo de
investigación. Reflexión
En relación a los problemas éticos en el desarrollo del trabajo, definitivamente
se requiere tener una correcta intención a fin de evitarlos y para ello se debe
estar claro en lo que se desea trabajar, cual es la problemática y sobre
cualquier interés personal que surja durante la realización de la investigación
si se tiene ética se debe dejar a un lado y proseguir hasta culminar lo
planteado al principio, a fin de no incurrir en estos.
PROBLEMAS ÉTICOS DEL
PROPIO INVESTIGADOR. En este sentido según los autores Buendía y Berrocal (2001), estos
resultan cuando el investigador:
·
Intencionalidad equivocada o desviada del propósito de la
investigación educativa.
· La ambición
de reconocimientos, esto conlleva a fraudes en el tratamiento de la
información, al difundir datos falsos.
·
El asumir la actitud equivocada genera daños intrínsecos, que
según los autores antes citados, son aquellos que se producen por el desarrollo
del propio proceso, como por ejemplo utilizar la decepción o cansancio para el
estudio de este tipo de problemas. Y extrínsecos, aquellos que se generan por
la mala utilización que hacen de los resultados, personas ajenas al
investigador, esta actuación causa daños a la imagen política y social de la
profesión del investigador. Ejemplo de ello es utilizar investigaciones sobre
razas para jerarquizarlas en mejores o peores. En este mismo orden de ideas
Warwick (1982), elaboro una taxonomía de daños por el mal uso de los resultados
de la investigación y preciso los siguientes: daños a los participantes, a los
investigadores y a la profesión de la investigación y a la sociedad en general.
Determinar los problemas éticos del propio investigador al momento de realizar un trabajo de
investigación. Reflexión
En relación a los problemas éticos del propio investigador, estos
surgen producto de desviaciones a intenciones erradas, por lo cual, si el
investigador realiza trabajos en función de sus intereses particulares y no en
función de transformar una realidad negativa, no se puede hablar de
investigación educativa, puesto que esta da respuesta a necesidades que surgen
de la practica educativo, si admitimos este planteamiento de Sánchez (1997),
entonces siempre se cometerá este tipo de situación problema, entonces si
queremos evitarlos debemos ceñirnos a los principios éticos y a las necesidades
propias de nuestro medio educativo.
DAÑOS A OTROS
INVESTIGADORES. Según Buendía y Berrocal (2001), es el peor de todos, pues son
colegas de la misma profesión. Entre ellos se destacan: El Plagio. Se
manifiesta al copiar textualmente un trabajo de investigación de otros y
presentarlo como propio, utilizar textos o citas de otros autores sin mencionarlos y utilizar la
propiedad intelectual de un autor, sin su permiso.
Según Rubén Comas y
Jaume Sureda (Huerta, 2008), estos sugieren dos considerandos
básicos:
·
Plagio intencional. En
ese caso se busca premeditadamente robar o falsear información. Se manifiesta
por tomar datos, hipótesis, procedimientos, conclusiones, párrafos, artículos,
etc. de otros, sin dar el crédito que corresponde y atribuyéndose la autoría.
·
Plagio accidental. En
la mayoría de los casos producto de la inexperiencia o al mal manejo de la
información, no necesariamente asociado a intención. Citar de una manera
inapropiada una fuente, equivocar la manera de presentar los datos, elaborar
conclusiones utilizando fraseología de otros.
Describir los daños causados a otros investigadores al momento de
realizar un trabajo de investigación. Reflexión.
Estos son daños morales que se causan al copiar sin reconocer la
fuente, producto de debilidades, carencias como investigadores, por tanto, se
eliminaran en la medida en que se solventen dichas debilidades, se nutra con
información propicia a lo que se investiga y se logre empatía con lo que se está
trabajando, ello será posible en la medida en que el docente interactué, se
nutra, indague y deje a un lado la pereza y el facilismo al momento de
investigar.
DAÑOS SOCIALES. Estos se producen al utilizar datos falsos. Según Buendía y Berrocal (2001), la
utilización de datos falsos se puede deber a:
·
Para confirmar hipótesis, en este caso se cambian los datos
obtenidos para confirmar hipótesis que son falsas.
·
Para conseguir mayor reputación, los resultados y conclusiones son
inventadas.
Según los
autores citados anteriormente las causas que llevan a efectuar este tipo de
acción se debe a:
·
Competencias entre investigadores para ofrecer primicias en los
hallazgos.
·
Conflictos con las empresas cuando los resultados no son los
esperados. Esto ocurre en las financiaciones de las investigaciones, según el
propósito del que financia.
·
Necesidad de conseguir un grado profesional
·
Abusos por parte del que tiene el poder económico.
Establecer los daños sociales al momento de realizar un
trabajo de investigación. Reflexión
Si el docente goza de
prestigio y cae en esta situación definitivamente será fatal. Este tipo de daño
se genera al no haber compatibilidad entre el docente que investiga y los
intereses para quien trabajo, de igual manera cuando se obtienen resultados no
esperados y que impiden el avance de planes externos no compatibles y además
del dominio de aquel que dispone de todos los recursos necesarios ante aquel
que investiga y depende de él para poder realizarlo. Esto implica entonces que
el docente investigador debe aprender a financiar sus trabajos de manera
planificada, debe trabajar en función de las reales necesidades y debe disponer
de todos aquellos insumos al momento de emprender una investigación. Por lo
tanto al falsear información el daño no solo repercute en el entorno propio de
la investigación sino también en el más inmediato.
METODOLOGÍA.
A fin de
dar respuestas a los objetivos planteados, se utilizó la investigación
documental, revisando para ello: libros; artículos, revistas, publicaciones
periódicas de la especialidad y ensayos. El objetivo de
la investigación documental fue elaborar un marco teórico conceptual para
formar un cuerpo de ideas sobre el objeto de estudio y dar respuestas a las
interrogantes planteadas en el planteamiento del problema a través de la
técnica del análisis a fin de reafirmar, refutar o complementar la información
obtenida en función de los objetivos propuestos. La información obtenida permitió aumentar el grado de certeza del
análisis realizado, además de proporcionar las condiciones de fiabilidad y objetividad
documental. Se utilizó como medio de información las fuentes primarias.
RESULTADOS.
Como reflexión final, luego de haber expuesto en la fundamentación
teórica reflexiones particulares se
puede resumir como resultados:
·
Todo
docente debe ser investigador, que propicie la transformación, el proceso de
cambio a favor del medio educativo en el cual se desenvuelve y la investigación
educativa se presta para ello.
·
Como
docente y profesional, debe estar formado en valores a fin de reflejar a través
de su actuar los principios éticos necesarios al momento de realizar cualquier
tipo de investigación o actividad.
·
Es
indispensable conocer, diferenciar los problemas éticos respecto a los
participantes a fin de evitar caer en ellos y causar daños irreversibles en
cada uno de los que participan, teniendo siempre presente que son seres humanos
y no simples objetos en sus manos para satisfacer sus intereses particulares.
·
Con
respecto a los problemas éticos durante el desarrollo del trabajo, estos se
presentaran siempre y cuando el investigador no esté claro en su objetivo o
propósito, por lo tanto, se requiere trabajar en función de la necesidad del
medio educativo y mantenerse firme ante cualquier eventualidad de tipo
individual o particular que se puede presentar durante el mismo.
·
En
relación a los problemas éticos del propio investigador, estos son posibles
desde el momento en el cual el investigador desvía su propósito inicial por
motivos ajenos a la investigación y propios a sus intereses.
·
En
atención a los daños a otros investigadores, estos se presentan al plagiar por
carecer de las herramientas necesarias para desarrollar o culminar una
investigación, por lo cual, todo investigador debe planificar, analizar,
precisar cada una de los insumos requeridos así como sus deficiencias o
debilidades al momento de llevar a cabo una investigación a fin de lograr su
término sin complicaciones de este tipo como el plagiar información y
considerarla como propia.
·
Y
con respecto a los daños sociales, si el investigador conoce, planifica se
organiza, al comenzar un trabajo de investigación este no caerá en esta
situación de utilizar datos falsos, puesto que todo lo tendrá según su
responsabilidad, dedicación, consagración y esmero al momento de seleccionar y
trabajar en la investigación.
CONCLUSIONES.
Luego de
haber planteado la fundamentación teórica y haber elaborado una pequeña
reflexión concluyo afirmando que:
·
Todo
docente debe desempeñar su rol como investigador a través de la investigación
educativa, que es la que se adapta a sus prácticas diarias.
·
Como
profesionales de la docencia existen valores y unos principios éticos que
debemos practicar en nuestro diario interactuar con los estudiantes, padres,
compañeros, comunidad en general.
·
Los
problemas éticos sean con respecto a los participantes, en el desarrollo del
trabajo, del propio investigador, daños a otros investigadores y daños
sociales, se evitaran en la medida en que el investigador este consciente de:
el propósito de su investigación debe estar en función de la necesidad surgida
de su práctica educativa y no en función de sus interés propios o en función de
otros intereses ajenos; debe reconsiderar el actuar siempre pese a sus
condiciones según sus principios éticos y morales; debe respetar aquellos que
deban participar en su investigación como semejantes y no simples muñecos u
objetos; debe esforzarse, esmerarse y dedicarse a buscar información que nutra
su investigación a fin de evitar el plagiar o inventar resultados o
conclusiones inadecuadas además del utilizar datos falsos.
·
Sin
dudas el investigar amerita constancia, trabajo, esfuerzo, todo con el fin
luego de obtener una satisfacción que podemos disfrutar y compartir, al saber
que hemos hecho una labor con responsabilidad, moral y ética.
FUENTES CONSULTADAS
Angulo y Acuña
(2005). Ética del docente. Revista Educación en Valores. Año/ Vol. 1/ N 3. Valencia, España:
Universidad de Carabobo.
Alexei, C (2005). La
ética profesional. Una exigencia
en la formación del profesorado general integral dentro del contexto de la escuela cubana actual, Cuba: Granma.
Buendía L. y
Berrocal E. (2001). La Ética de la
Investigación Educativa. Universidad de Granada.
Chávez, G. (2008):
“La responsabilidad: rasgo de la
profesión y condición de posibilidad de la ética profesional”, en A. Hirsch
y López, R.: Ética profesional y
posgrado en México. Valores profesionales de profesores y estudiantes.
Universidad Autónoma de Sinaloa y otras. México: 293-
336.
Escámez, J.
(2006): “La ética profesional del
mediador familiar”, en Hirsch, A. (coord.): Educación, valores y desarrollo moral. Valores de los estudiantes
universitarios y del profesorado. Gernica. México: 49-71.
González M. (Compilador). Selección de lecturas sobre Ética Informática. Universidad de las Ciencias
Informáticas, Mayo del 2006.
González, M
(2005). El Profesorado Universitario: Su concepción y Formación como Modelo de Actuación
Ética y Profesional. La Habana, Cuba: Universidad de la Habana.
Guzmán, W
(2004) 4 Principios éticos del educador para que nuestra educación sea humana y cristiana de calidad. Bogotá,
Colombia: Distrito Lasallista. Publicado en http: // www.lasalle.org.co Recuperado
en fecha 15 de julio 2008.
Hirsch, A. (2008): “Valores
básicos que la universidad debería promover en su alumnado y profesorado. Los
profesores de posgrado de la Universidad Nacional Autónoma de México”, en
A. Hirsch y López, R.: Ética
profesional y posgrado en México. Valores profesionales de profesores y
estudiantes. Universidad Autónoma de Sinaloa y otras. México: 23-43
Hortal, A (2002): Ética general de las profesiones.
Desclée. Bilbao.
Huerta H. (2008). Boletín
electrónico AEG – Artículos de interés Aspectos éticos del plagio académico de los
estudiantes universitarios
Madé
(2002) Educación Superior, Medio Ambiente y Reingeniería Académica.
Santo Domingo, R.D.
McCulloch, Gary (2003) Hacia
una historia social de la investigación educativa, en Sikes, Nixon y Carr
(2003) (eds.) los fundamentos morales de la investigación educativa:
investigación, conocimiento y valores, Inglaterra, McGraw-Hill Educación / Open
University Press, págs. 18-31
Nixon, Walker y Clough (2003) Los fundamentos morales de la investigación educativa de investigación
como una práctica reflexiva, en Sikes, Nixon y Carr (2003) (eds.):
conocimiento, investigación y valores, Inglaterra, McGraw-Hill Education / Open
University Press, págs. 86 - 104.
Olivé, León, (2003) Ética
aplicada a las ciencias naturales y a la tecnología en Ibarra y Olivé
(Eds.)Cuestiones éticas en ciencia y tecnología en el siglo XXI, Madrid,
OEI, pp. 181.
Sánchez, C. (1997): «Dilemas
éticos de la investigación educativa», en Revista de Educación, 312;
271-280.
Universidad
Nacional Experimental “Rafael María Baralt” (2005) Normas para la Elaboración y Presentación de Informes de Investigación.
Cabimas. Junio
No hay comentarios:
Publicar un comentario